Una transacción con tarjeta puede clasificarse como fallida por cualquiera de los siguientes motivos:
- Fondos insuficientes en la cuenta del titular de la tarjeta
- Tarjeta expirada
- Detalles de tarjeta inválidos
- El emisor de la tarjeta ha habilitado algoritmos de prevención de fraude
La forma más segura de averiguar por qué falló una transacción es pedirle a su cliente que se comunique con su banco o compañía emisora de la tarjeta y solicitar más información.